Moteros, una raza aparte... (Parte I)

Un motorista puede nacer en un cualquier momento, a menudo no es mas que una cuestión de oportunidad. Algunos tienen su primer contacto con una moto cuando son jóvenes y crecen con ella, otros van aplazando la compra de su primera moto para "mejores días" y finalmente hay gente que de alguna forma ya lleva dentro el "bichito" (a veces sin saberlo) y solo les falta la oportunidad (o el valor) de montarse en una moto. El hecho es que después que te muerda el bicho ya no podrás deshacerte de el: estas enganchado!
Algunos quieren empezar, pero se ven limitados por miembros de la familia que declaran: "Las motocicletas son peligrosas, yo conozco a alguien que casi se mató en un accidente..." Tal vez sea tu esposa o esposo que no quieren verte salir herido. Lo más probable, podría ser que ahora tienen los niños a cuidar y tu cónyuge declare: "La moto tendrá que esperar." Todo el mundo tiene una historia de por qué no puede tener una moto y de como desearían tenerla. La realidad es que si de verdad llevas dentro el "bicho" de las motos mas tarde o mas temprano te compraras una, y no hay ni familia ni amigos que logren disuadirte de eso.
Sin embargo deja que te diga: a partir del día que te montes en una moto, metas "la primera" y salgas a la carretera ya eres "uno de esos tíos duros" del imaginario colectivo. Llevas literalmente tu vida en tus manos y estarás lo mas expuesto y vulnerable que algún día podrás estar! Si tienes miedo a la muerte mejor que lo pienses bien antes de salir, porque si pisas un animal muerto en la carretera o si algún coche no te ve mientras tu vas tan solo a 60km/h, lo mas probable es que de un momento al otro te encuentres donde termina el arco iris...
Un amigo motero me ha dicho hace ya mas de 30 años: "La moto es como una serpiente. Si le tienes miedo te morderá, pero si no le tienes miedo te morderá también. Lo único que podrás hacer es estar mentalizado y preparado para cuando te muerda..."